Manuel Salazar y Baquijano fue una figura destacada en la historia política del Perú, principalmente conocido por su papel durante el breve periodo de inestabilidad política que siguió a la independencia del país. Nacido en 1777 en Lima, pertenecía a una familia aristocrática y ocupó importantes cargos en la administración colonial española antes de dedicarse a la política en la nueva república.
Salazar y Baquijano fue presidente del Consejo de Ministros y desempeñó brevemente el cargo de presidente interino del Perú en 1827, durante un periodo de gran inestabilidad política y militar. Su mandato fue corto y se produjo en un contexto de luchas de poder entre las distintas facciones políticas que se disputaban el control de la joven nación peruana.
Su papel en la política peruana fue principalmente administrativo, y a menudo se le considera una figura de transición más que un líder político fuerte. Durante este periodo, el país enfrentaba desafíos como la organización del gobierno republicano, las tensiones internas y los conflictos con las naciones vecinas.
Manuel Salazar y Baquijano falleció en 1850. Aunque su paso por la presidencia fue breve, formó parte de la generación de líderes que intentaron consolidar la República del Perú en los primeros años de su existencia, marcados por luchas internas y guerras civiles. Su nombre es hoy relativamente desconocido en comparación con otras grandes figuras de la historia peruana, pero desempeñó un papel en la fase de transición posterior a la independencia.