Este baile debe su nombre a que antiguamente las mujeres llevaban un atuendo de plumas de alcatraz atado al nivel de la cintura y de este traje sobresalÃa una larga pluma, a la que el hombre debÃa prender fuego pero sin perder el ritmo del baile. Los ágiles movimientos impedÃan generalmente que el hombre lograra su propósito.